martes, 26 de octubre de 2010

"Una policía sin manchas de sangre y llena de dignidad"...

Foro Social Indígena 2010 y Policía Comunitaria
Texto y fotos: Argelia Chagoya Martínez

Cuando se llega al municipio de Tlapa de Comonfort, en el estado de Guerrero, se puede visualizar el nudo montañoso que da cobijo a un sinfín de pueblos y comunidades en su mayoría indígena, como el de las lenguas Me´phaa y Nuu savi, (Tlapaneco y mixteco), desde donde convergen diversos flujos de población, ya que es una zona que limita con Oaxaca y Puebla.

A unos cuantos kilómetros de la ciudad de Tlapa, en el municipio de Malinaltepec, específicamente en la comunidad de la Ciénega, se encuentra la Universidad Intercultural del Estado de Guerrero, edificio de instalaciones modernas que alberga carreras como Desarrollo Sustentable, Lengua y Cultura, Medicina Tradicional, Ingeniería Forestal, Turismo Alternativo, entre otras.

En medio de caminos inhóspitos y desde una vista con infinidad de montañas, se realizó del 8 al 12 de Octubre en esta Universidad Intercultural el Foro Social Indígena 2010, llamado “El foro en la montaña”. Aquí se discutieron temas como territorio y autonomía, movimientos sociales, educación, salud comunitaria, soberanía alimentaria, equidad de género, radios comunitarias, represión, cultura e identidad, manejo de recursos naturales, entre otros.

También se impartieron talleres por la tarde como proyectos de desarrollo comunitario autogestivos, software libre, medicina tradicional, matemáticas aplicadas a las ciencias sociales, comercio justo, entre otros

El desarrollo del Foro Social Indígena fue fructífero y enriquecedor, pues hubo intercambio de experiencias e incluso se llegaron a acuerdos, ya que hubo mesas de discusión con la participación de diversas organizaciones con diferentes intereses, de estudiantes y de actores que trabajan sobre las problemáticas provenientes de toda la República Mexicana, incluso de diversas partes del mundo.

De igual manera durante la impartición de talleres se pudieron intercambiar conocimientos y de manera muy dinámica llevar a la práctica los conocimientos adquiridos, así pues por las tardes se llevaron a cabo un sinfín de eventos culturales que incluían proyección de películas y documentales, bailes con música de la región y presentaciones de danza y canto.

Cabe mencionar que la Universidad Intercultural del Estado de Guerrero, al encontrarse dentro del municipio de Malinaltepec, está bajo el resguardo de la Polícia Comunitaria, esto por decisión misma de las comunidades. Desde la carretera Tlapa-Marquelia, que es el camino que lleva a la Universidad, comienzan asomarse retenes de una policía que por mucho difiere a la que conocemos comúnmente.

Durante la inauguración del Foro Social Indígena se hizo la presentación de la policía comunitaria por parte del rector Rafael Aréstegui Ruíz y Pablo Guzmán Hernández, Coordinador Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) donde pertenece la Policía Comunitaria, así como de otras personalidades.

En tanto que a unos escasos días del marco del XV aniversario de la Polícía Comunitaria se hizo reconocimiento de la labor de las comunidades de las regiones Costa y Montaña por el éxito de está organización, aunque con altibajos. Se dijo que eran una ”Polícía sin manchas de sangre y llena de dignidad”

En el trascurso del evento se asomaban pequeños grupos de la policía Comunitaria, que daban sus rondines, eran hombres uniformados con escopetas, su concentración visible, es debido a que resguardan un evento masivo, alrededor de 400 personas, es por eso también que portan su uniforme de gala: camisola verde militar, pantalón, gorra y botas negras.

Al ver a la policía comunitaria con su traje verde militar, resguardando los alrededores y la universidad con un fondo de paisaje que es el horizonte y la infinidad de montañas, se llega a percibir un aire de tranquilidad, muy contrario cuando se observa un verde militar del gobierno.

Se observan jóvenes y señores, de todas las edades y estaturas, que con un rostro sereno; cuidan y evitan percances, cómo ellos mismos dicen “Sólo el pueblo defiende al pueblo” y es que son hombres elegidos desde las propias comunidades a través de asambleas, para recibir este cargo que dura tres años, y al término de este tiempo es la misma población quien decide si pueden permanecer más tiempo en él.

La elección es por parte de los miembros de las comunidades, y esto lo hacen a partir de ciertos criterios como: un buen prestigio, se eligen a personas honestas, sin antecedentes penales y que no hayan emigrado, los policías no reciben sueldo, lo hacen en beneficio de su comunidad y lo que ganan es el reconocimiento y reputación. Su labor primordial es resguardar veredas y caminos, así como pasajeras y fiestas o eventos que aglutinen gente.

Esta organización comunal es digno ejemplo de propuesta de autonómica en pueblos originarios que dan paso a una identidad comunal en la región. Pero no sólo se trata de pueblos originarios, sino que al mantener comunicación con mestizos y población negra, la hacen una estructura más amplia. Esto surgió como respuesta al fracaso de la justicia institucional o por parte del gobierno.

Es de reconocerse también la gran labor de la policía comunitaria, que ha trabajado durante sus quince años de existencia, ya que a partir de una identidad política compartida han sobrepasado barreras comunitarias, municipales y hasta regionales, su incidencia va más allá de las diferentes modos de vida de los pueblos originarios que ahí se concentran, la Costa-Montaña ha logrado unificar a su beneficio un sistema normativo que no sólo es cuestión de seguridad, sino que también lo es en materia social, política, cultural, económica y religiosa.

RESOLUTIVOS DE LAS MESAS DE DISCUSIÓN... un ejemplo.

10: Construcción del poder popular, participación ciudadana y democracia.

Acuerdo sobre el poder popular.

El poder como existe y se practica actualmente no es un poder construido desde abajo, sino varios poderes construidos y ejercidos desde diferentes grupos particulares con intereses específicos y desde arriba. Existe la necesidad de construir y ejercer uno o varios poderes populares desde los diferentes grupos y en diferentes niveles, pero siempre desde el pueblo. Sobre la construcción y el ejercicio de este poder popular existen dos principales visiones: una plantea la construcción de este poder para acceder al estado y transformar el sistema democratizándolo, la otra plantea la construcción de un poder creado por el pueblo y para la defensa del pueblo para fortalecer los proyectos de las bases sin la lucha por el poder del Estado.
Reflexiones

+ El individualismo es la mejor manera de permitir que el gobierno imponga las intenciones de los poderosos; la organización colectiva comunitaria, por el contrario, es la forma de oponerse a esas formas de dominación. “Si el gobierno encuentra un camino de arena pasa fácil, pero si encuentra piedras no va a poder”.
+ El poder político construido o conquistado por el pueblo se mantiene más allá de los tiempos impuestos por la política, es decir que trasciende los procesos electorales propios de la forma de acceso al poder por medio de las plataformas de los partidos. En este sentido la organización social constituye la manera más sólida de establecer un ejercicio efectivo del poder popular.
+ La autocrítica en la CRAC y la crítica desde fuera son esenciales para la consolidación y crecimiento de la misma, pues hay muchos vicios dentro del proyecto aparte de la cooptación partidista y el asesinato de miembros. Esos vicios tienen que empezar a diluirse pues contribuyen a generar problemas y no a solucionarlos.
+ Es preciso construir relaciones horizontales en la forma de gobernar y sobre todo a nivel de las relaciones sociales en general, de otra forma siempre se privilegiarán intereses particulares que no generan soluciones reales para los problemas colectivos.
+ Atacar la delincuencia no es atacar las causas verdaderas que la producen, pues esta es fruto del sistema económico imperante que crea la desigualdad social y promueve el individualismo, por ello si la CRAC no avanza de manera integral abordando otras cuestiones fundamentales como la salud, la educación y la soberanía alimentaria, corre el riesgo de no lograr sus objetivos.
+ Además del proyecto de justicia y seguridad pública, es necesario fortalecer un proceso integral de desarrollo comunitario con educación, salud, desarrollo tecnológico y otros aspectos que fortalecerán el proceso de justicia y seguridad.
+ Los partidos políticos deben ser excluidos de la toma de decisiones sobre las acciones, la estructura y gestión de la Policía Comunitaria, para que ésta no funcione como una herramienta más del Estado para llenar espacios problemáticos que no atiende el gobierno.
+ Se debe fomentar la vinculación de las diferentes organizaciones para apoyar el proyecto integral de la CRAC en todos los ámbitos donde presenta deficiencias y donde otras organizaciones ya se han fortalecido.
+ Vincularnos y discutir en las mesas de trabajo de los aniversarios de la CRAC con los policías que la integran, de manera que se fortalezca la formación de los comunitarios.
+ Debemos unirnos en la lucha, basándonos en los puntos de acuerdo colectivo y dejar los desacuerdos para el trabajo individual de las organizaciones.
+ El problema de la lucha por la defensa de los pueblos y el territorio no solo es mexicano, sino latinoamericano. Es pertinente llamar a un foro latinoamericano, para la discusión de la problemática.

jueves, 21 de octubre de 2010

Zona Autónoma Makhnovtchina (ZAM), D.F.

Un espacio autónomo en pleno DF
La ZAM
Fuente y foto: Desinformémonos

http://espora.org/zam/sitio/ (ZAM)

En el corazón de la Ciudad de México y sin el permiso de nadie, crece y se fortalece un espacio autogestionado por un grupo de jóvenes que se declaran antiautoritarios, con gran influencia del zapatismo, el anarquismo y el ecologismo.

Entrevista al colectivo de la ZAM

México, DF. La Un espacio autónomo en pleno DF
La ZAM
En el corazón de la Ciudad de México y sin el permiso de nadie, crece y se fortalece un espacio autogestionado por un grupo de jóvenes que se declaran antiautoritarios, con gran influencia del zapatismo, el anarquismo y el ecologismo.

Entrevista al colectivo de la ZAM

México, DF. La Zona Autónoma Makhnovtchina (ZAM) es un espacio autónomo que vive y se organiza en la Ciudad de México. Inició en 2009 como la continuación de los que algunos jóvenes hacían desde años atrás en diferentes colectivos punks y autónomos. “Teníamos la necesidad de un espacio para hacer las actividades de nuestros proyectos”, dicen los jóvenes que gestionan la ZAM. “Hace poco más de año y medio unos compas de una imprenta relacionada con el zapatismo nos cedieron este espacio, y desde ese entonces es el lugar de nuestras actividades y proyectos manteniéndolo autónomo dentro de la Ciudad.”

El nombre del lugar es quizás lo que inmediatamente llama más la atención. Explican sus integrantes en este ejercicio de entrevista colectiva, que el acrónimo ZAM es un híbrido entre un texto que les gustó e influenció que se titula T.A.Z. Temporary Autonomous Zone (en español Zona Temporalmente Autónoma), escrito por el anarquista estadounidense Hakim Bey, y el movimiento de la Makhnovtchina. El texto, cuentan, habla de las Zonas Autónomas que aparecen y desaparecen en el mundo creando “huecos” al control del capitalismo, haciendo un espacio libre y de creación en cualquier lugar, y después desaparece para aparecer en otro lado, en otro punto.

Esta vez apareció en la Ciudad de México, afirman con orgullo: “En el nombre también reivindicamos el movimiento de la Makhnovtchina, que fue un movimiento anarquista ucraniano que tenía un ejército de campesinos y obreros llamado Ejercito Negro, una historia muy parecida a la de Emiliano Zapata.” Los miembros del colectivo de la ZAM aclaran que si bien el proyecto fue iniciado en su mayoría por punks, “no sólo ellos trabajan aquí, pues la intención no es hacer un gueto ni nada similar.” La idea es construir un espacio amplio y, por decirlo de alguna manera, “un pequeño mundo donde quepan muchos.” Afirman que sólo tienen como principio “no dar espacio a los partidos políticos ni grupos autoritarios o de tendencias racistas, fascistas, sexistas, homofóbicas o xenófobas”.

Si se trata de definirse políticamente, los de la ZAM prefieren simplemente decir: “Básicamente nos declaramos antiautoritarios aunque no tenemos una tendencia ideológica única.” Y es que en la ZAM “corren muchas tendencias e influencias políticas de izquierda que van desde el anarquismo, pasando por el ecologismo y el zapatismo.” No están por la toma del poder, ni pretenden sacar dinero de los movimientos sociales, ni aliarse con partidos políticos. Tampoco, afirman, les interesan los liderazgos ni los protagonismos. “Nos declaramos autónomos y en este espacio hay muchos mundos que comparten estas tendencias e influencias.”

Si bien no hay una ideología única que rige a la ZAM, en la práctica y en el trabajo cotidiano existe una fuerte adherencia a los principios del apoyo mutuo, el “hazlo tú mismo” y a la horizontalidad. Eso hace posible que tendencias que aparentemente son distintas, como la del movimiento de software libre, el ecologismo y el movimiento punk, convivan y se retro-alimenten. “Intentamos que un espíritu de generosidad y respeto a la libertad del prójimo se vea reflejado en las formas de trabajar.” Es a través de este constante esfuerzo hacía la cooperación, la reciprocidad en el intercambio de recursos, habilidades e información, que esperan involucrar nuevas propuestas y participaciones en la ZAM.

En la ZAM se desarrollan distintas actividades. Relatan los miembros del colectivo que básicamente se trata de actividades relacionadas con el zapatismo, como difusión y apoyo; el software libre, como herramientas tecnológicas libres para los movimientos sociales; cultura punk, como forma de vida alterna y crítica; ecología urbana, como respuesta al cambio climático, la promoción de áreas verdes en la ciudad y como hábitos de vivir de una manera más auto-sustentable; arte en resistencia, como expresión creativa y de protesta, entre otras.

Además de estas actividades existen varios proyectos que conviven en el espacio. Está el Hacklab ZAM, que es un espacio de apoyo mutuo basado en la ética Hacker. “Basamos nuestras actividades en los principios de software libre y el espíritu de compartir información y saberes.” Organizan talleres de computación, que abarcan diversos temas como la seguridad informática, la publicación de páginas web y la creación de medios audiovisuales con software libre. “Definimos como hacker a una persona con ganas de entender cualquier sistema técnico y luego apropiárselo”, explican. La ética hacker, añaden, “va contra la tendencia común que sigue la tecnología para reforzar jerarquías con empresas o tecnócratas, que dictan los parámetros de nuestras vidas. Como hackers promovemos la experimentación técnica, el trabajo colaborativo y la educación mutua.”

Aunado a lo anterior, en la ZAM opera una galería que ofrece a los proyectos de arte en lucha relacionados con los movimientos sociales un espacio para compartir su trabajo con el público. Esta galería opera de manera autogestiva y ofrece a los participantes un espacio para ejercer su libertad de expresión sin censuras, intereses económicos y burocracias de por medio. “Aquí se han exhibido proyectos de grabado, serigrafía, scratch, foto y graffiti que demuestran posturas como el anticapitalismo, el ecologismo y apoyo a las comunidades autónomas.” Existe una invitación abierta a nuevas propuestas que “se comprometan críticamente con el panorama poético, económico, ecológico, sociocultural y político contemporáneo”.

Existe también el proyecto ecológico de la ZAM, que incluye un jardín y una pequeña huerta urbana donde se han sembrado jitomates, fresas, lechugas y aguacate. La tierra para estas plantas proviene de la composta donde se depositan todos los desechos de la cocina comunitaria de la ZAM. En esta área se coleccionan diversos materiales como plásticos, madera, latas, fierro y aluminio para su reciclaje posterior. Se aprovechan, por ejemplo, las llantas viejas de autos para fabricar macetas. Además de reutilizar todas las aguas grises de la ZAM, también se ha implementado un sistema rudimentario de recolección de agua de lluvia. “Buscamos una mayor participación en estas actividades para seguir fortaleciendo el proyecto del huerto y además queremos desarrollar un sistema de sanitarios secos e implementar un mejor sistema para la reutilización y aprovechamiento de aguas grises”, relatan.

Acerca de los numerosos eventos que se realizan prácticamente cada semana, los integrantes de la ZAM afirman que todas las actividades son de acceso libre, con excepción de algunas fiestas y conciertos. Al término de las actividades, explican, “se pide una cooperación voluntaria para apoyar los gastos de espacio”. De esta manera, matizan, “cada quien coopera con lo que puede y no se excluye a nadie, y en las fiestas y conciertos se pide una colaboración monetaria en la entrada y se venden algunas bebidas para recaudar recursos para el espacio”.

Un proyecto de tales dimensiones, reconocen, necesita mucho compromiso y labor cotidiana. Son dos las razones que los activistas señalan como “los motivos para hacer este proyecto”. La primera es que “nos gusta mucho lo que hacemos, lo hemos adoptado como una forma de vida e intentamos hacerla lo más divertida posible”. La otra razón es que “no nos gusta como está organizada esta sociedad ni la destrucción del planeta que el capitalismo está realizando. Por eso intentamos desarrollar y difundir alternativas para una vida más libre”.

Lo anterior, advierten, porque no hay espacios en esta ciudad para los jóvenes, y los que existen son administrados por adultos que no aciertan en el interés de los jóvenes. Por esto en la ZAM “intentamos hacer un espacio en el que de manera autogestiva seamos los mismos jóvenes los que desarrollemos las actividades que a nosotros nos interesan”.

Actualmente la ZAM se ubica en la planta baja de un edificio que históricamente ha albergado un sin fin de actividades de carácter político social; originalmente fue propiedad del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT). A través de los años el uso del edificio, al igual que el partido, fue marcado por fuertes divisiones políticas e ideológicas. Lo que una vez fue el estacionamiento del edificio fue convertido en una imprenta zapatista y así continuó por muchos años antes de ser cedido al grupo de jóvenes que fundaron la ZAM.

Actualmente este espacio está amenazado. Explican sus integrantes: “En este momento la ZAM está siendo amenazada por una inmobiliaria que pretende usurpar la propiedad del edificio para fines de lucro. Es por ello que queremos defender nuestro trabajo en este espacio, multiplicando la cantidad y diversidad de actividades que se realizan aquí”. El futuro es incierto. Existe la posibilidad real de un desalojo pero, dicen sus gestores, “aun así no cesaremos con nuestras actividades e invitamos a todo el mundo para que vengan a conocer la ZAM y si es de su interés se sumen a las actividades”.

“Nos gustaría -añaden- que surjan nuevos espacios autónomos por todas partes y que ayudemos así a generar una vida de libertad, apoyo mutuo y anticapitalismo.” Por esa razón, y a pesar de las amenazas de desalojo, la ZAM sigue su programación de eventos. “Para los meses de octubre y noviembre tenemos como siempre actividades de software libre, como el Tech-io, en donde gente interesada en aprender y compartir saberes se reúne; la exposición de arte “Tan lejos de dios”, en la que participan artistas chicanos, de México y de Oaxaca.”

También se organizarán estos meses las kafetas de la Red de Medios Libres, donde se sirve café, comida y otras bebidas acompañadas de proyección de videos. Habrá un taller de arte urbano, un evento de trueque (intercambio gratuito de todo tipo de cosas) y muchas otras actividades que se irán programando sobre la marcha. es un espacio autónomo que vive y se organiza en la Ciudad de México. Inició en 2009 como la continuación de los que algunos jóvenes hacían desde años atrás en diferentes colectivos punks y autónomos. “Teníamos la necesidad de un espacio para hacer las actividades de nuestros proyectos”, dicen los jóvenes que gestionan la ZAM. “Hace poco más de año y medio unos compas de una imprenta relacionada con el zapatismo nos cedieron este espacio, y desde ese entonces es el lugar de nuestras actividades y proyectos manteniéndolo autónomo dentro de la Ciudad.”

El nombre del lugar es quizás lo que inmediatamente llama más la atención. Explican sus integrantes en este ejercicio de entrevista colectiva, que el acrónimo ZAM es un híbrido entre un texto que les gustó e influenció que se titula T.A.Z. Temporary Autonomous Zone (en español Zona Temporalmente Autónoma), escrito por el anarquista estadounidense Hakim Bey, y el movimiento de la Makhnovtchina. El texto, cuentan, habla de las Zonas Autónomas que aparecen y desaparecen en el mundo creando “huecos” al control del capitalismo, haciendo un espacio libre y de creación en cualquier lugar, y después desaparece para aparecer en otro lado, en otro punto.

Esta vez apareció en la Ciudad de México, afirman con orgullo: “En el nombre también reivindicamos el movimiento de la Makhnovtchina, que fue un movimiento anarquista ucraniano que tenía un ejército de campesinos y obreros llamado Ejercito Negro, una historia muy parecida a la de Emiliano Zapata.” Los miembros del colectivo de la ZAM aclaran que si bien el proyecto fue iniciado en su mayoría por punks, “no sólo ellos trabajan aquí, pues la intención no es hacer un gueto ni nada similar.” La idea es construir un espacio amplio y, por decirlo de alguna manera, “un pequeño mundo donde quepan muchos.” Afirman que sólo tienen como principio “no dar espacio a los partidos políticos ni grupos autoritarios o de tendencias racistas, fascistas, sexistas, homofóbicas o xenófobas”.

Si se trata de definirse políticamente, los de la ZAM prefieren simplemente decir: “Básicamente nos declaramos antiautoritarios aunque no tenemos una tendencia ideológica única.” Y es que en la ZAM “corren muchas tendencias e influencias políticas de izquierda que van desde el anarquismo, pasando por el ecologismo y el zapatismo.” No están por la toma del poder, ni pretenden sacar dinero de los movimientos sociales, ni aliarse con partidos políticos. Tampoco, afirman, les interesan los liderazgos ni los protagonismos. “Nos declaramos autónomos y en este espacio hay muchos mundos que comparten estas tendencias e influencias.”

Si bien no hay una ideología única que rige a la ZAM, en la práctica y en el trabajo cotidiano existe una fuerte adherencia a los principios del apoyo mutuo, el “hazlo tú mismo” y a la horizontalidad. Eso hace posible que tendencias que aparentemente son distintas, como la del movimiento de software libre, el ecologismo y el movimiento punk, convivan y se retro-alimenten. “Intentamos que un espíritu de generosidad y respeto a la libertad del prójimo se vea reflejado en las formas de trabajar.” Es a través de este constante esfuerzo hacía la cooperación, la reciprocidad en el intercambio de recursos, habilidades e información, que esperan involucrar nuevas propuestas y participaciones en la ZAM.

En la ZAM se desarrollan distintas actividades. Relatan los miembros del colectivo que básicamente se trata de actividades relacionadas con el zapatismo, como difusión y apoyo; el software libre, como herramientas tecnológicas libres para los movimientos sociales; cultura punk, como forma de vida alterna y crítica; ecología urbana, como respuesta al cambio climático, la promoción de áreas verdes en la ciudad y como hábitos de vivir de una manera más auto-sustentable; arte en resistencia, como expresión creativa y de protesta, entre otras.

Además de estas actividades existen varios proyectos que conviven en el espacio. Está el Hacklab ZAM, que es un espacio de apoyo mutuo basado en la ética Hacker. “Basamos nuestras actividades en los principios de software libre y el espíritu de compartir información y saberes.” Organizan talleres de computación, que abarcan diversos temas como la seguridad informática, la publicación de páginas web y la creación de medios audiovisuales con software libre. “Definimos como hacker a una persona con ganas de entender cualquier sistema técnico y luego apropiárselo”, explican. La ética hacker, añaden, “va contra la tendencia común que sigue la tecnología para reforzar jerarquías con empresas o tecnócratas, que dictan los parámetros de nuestras vidas. Como hackers promovemos la experimentación técnica, el trabajo colaborativo y la educación mutua.”

Aunado a lo anterior, en la ZAM opera una galería que ofrece a los proyectos de arte en lucha relacionados con los movimientos sociales un espacio para compartir su trabajo con el público. Esta galería opera de manera autogestiva y ofrece a los participantes un espacio para ejercer su libertad de expresión sin censuras, intereses económicos y burocracias de por medio. “Aquí se han exhibido proyectos de grabado, serigrafía, scratch, foto y graffiti que demuestran posturas como el anticapitalismo, el ecologismo y apoyo a las comunidades autónomas.” Existe una invitación abierta a nuevas propuestas que “se comprometan críticamente con el panorama poético, económico, ecológico, sociocultural y político contemporáneo”.

Existe también el proyecto ecológico de la ZAM, que incluye un jardín y una pequeña huerta urbana donde se han sembrado jitomates, fresas, lechugas y aguacate. La tierra para estas plantas proviene de la composta donde se depositan todos los desechos de la cocina comunitaria de la ZAM. En esta área se coleccionan diversos materiales como plásticos, madera, latas, fierro y aluminio para su reciclaje posterior. Se aprovechan, por ejemplo, las llantas viejas de autos para fabricar macetas. Además de reutilizar todas las aguas grises de la ZAM, también se ha implementado un sistema rudimentario de recolección de agua de lluvia. “Buscamos una mayor participación en estas actividades para seguir fortaleciendo el proyecto del huerto y además queremos desarrollar un sistema de sanitarios secos e implementar un mejor sistema para la reutilización y aprovechamiento de aguas grises”, relatan.

Acerca de los numerosos eventos que se realizan prácticamente cada semana, los integrantes de la ZAM afirman que todas las actividades son de acceso libre, con excepción de algunas fiestas y conciertos. Al término de las actividades, explican, “se pide una cooperación voluntaria para apoyar los gastos de espacio”. De esta manera, matizan, “cada quien coopera con lo que puede y no se excluye a nadie, y en las fiestas y conciertos se pide una colaboración monetaria en la entrada y se venden algunas bebidas para recaudar recursos para el espacio”.

Un proyecto de tales dimensiones, reconocen, necesita mucho compromiso y labor cotidiana. Son dos las razones que los activistas señalan como “los motivos para hacer este proyecto”. La primera es que “nos gusta mucho lo que hacemos, lo hemos adoptado como una forma de vida e intentamos hacerla lo más divertida posible”. La otra razón es que “no nos gusta como está organizada esta sociedad ni la destrucción del planeta que el capitalismo está realizando. Por eso intentamos desarrollar y difundir alternativas para una vida más libre”.

Lo anterior, advierten, porque no hay espacios en esta ciudad para los jóvenes, y los que existen son administrados por adultos que no aciertan en el interés de los jóvenes. Por esto en la ZAM “intentamos hacer un espacio en el que de manera autogestiva seamos los mismos jóvenes los que desarrollemos las actividades que a nosotros nos interesan”.

Actualmente la ZAM se ubica en la planta baja de un edificio que históricamente ha albergado un sin fin de actividades de carácter político social; originalmente fue propiedad del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT). A través de los años el uso del edificio, al igual que el partido, fue marcado por fuertes divisiones políticas e ideológicas. Lo que una vez fue el estacionamiento del edificio fue convertido en una imprenta zapatista y así continuó por muchos años antes de ser cedido al grupo de jóvenes que fundaron la ZAM.

Actualmente este espacio está amenazado. Explican sus integrantes: “En este momento la ZAM está siendo amenazada por una inmobiliaria que pretende usurpar la propiedad del edificio para fines de lucro. Es por ello que queremos defender nuestro trabajo en este espacio, multiplicando la cantidad y diversidad de actividades que se realizan aquí”. El futuro es incierto. Existe la posibilidad real de un desalojo pero, dicen sus gestores, “aun así no cesaremos con nuestras actividades e invitamos a todo el mundo para que vengan a conocer la ZAM y si es de su interés se sumen a las actividades”.

“Nos gustaría -añaden- que surjan nuevos espacios autónomos por todas partes y que ayudemos así a generar una vida de libertad, apoyo mutuo y anticapitalismo.” Por esa razón, y a pesar de las amenazas de desalojo, la ZAM sigue su programación de eventos. “Para los meses de octubre y noviembre tenemos como siempre actividades de software libre, como el Tech-io, en donde gente interesada en aprender y compartir saberes se reúne; la exposición de arte “Tan lejos de dios”, en la que participan artistas chicanos, de México y de Oaxaca.”

También se organizarán estos meses las kafetas de la Red de Medios Libres, donde se sirve café, comida y otras bebidas acompañadas de proyección de videos. Habrá un taller de arte urbano, un evento de trueque (intercambio gratuito de todo tipo de cosas) y muchas otras actividades que se irán programando sobre la marcha.

lunes, 18 de octubre de 2010

Copala: "todavía haya quienes se atreven a ver este genocidio como una lucha interétnica"

MULT asesina y hiere a varios desplazados del Municipio Autónomo de San Juan Copala

17 Octubre, 2010

Domingo 17 de octubre del año 2010.

A LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN HONESTOS

A LOS ORGANISMOS DE DERECHOS HUMANOS

A LOS PUEBLOS INDIGENAS DE MEXICO

A LA OTRA CAMPAÑA

AL EJERCITO ZAPATISTA DE LIBERACION NACIONAL

A OAXACA, MEXICO Y EL MUNDO

Compañeras, compañeros:

La comunidad Triqi de San Juan Copala hoy desplazada de su pueblo por el mal gobierno y sus sicarios se dirigen a las mujeres y hombres que tienen bueno su corazón para denunciar que la maldad y la ambición del poderoso no tiene limites, y no conformes con despojarnos de nuestro pueblo, los habitantes de Copala aun fuera de nuestra tierra seguimos siendo masacrados por paramilitares al servicio de este maldito sistema capitalista, quienes todavía tienen la desfachatez de llamarse gente de izquierda.

Ayer por la tarde fueron brutalmente asesinados en una emboscada en el paraje tres cruces cuando se dirigían a Yosoyuxi Copala los compañeros Teresa Ramírez Sánchez y Serafín Uvaldo resultando herido de gravedad el compañero Jordán Ramírez Gonzáles. Los últimos informes que tenemos es que Jordán no pudo ser atendido en el Hospital de Juxtlahuaca por que criminales de estos grupos se encontraban a las afueras y no conformes con eso anduvieron patrullando con hombres armados buscando a nuestro compañero para rematarlo mientras la policía hace como que no ve o como que no está, esto se explica porque Jordán es de los compañeros mas comprometidos con la autonomía y por que fue de los últimos en salir de Copala el día 19 de septiembre. Primero quiso estar seguro que ya no quedaba nadie de los compañeros para salir, solo entonces decidió salir él.

Es esa la respuesta del gobierno mexicano a las medidas cautelares que dicto la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Es esa la respuesta del MULT por no aceptar su dialogo amañado y convenenciero. Lo que para nosotros resulta mas doloroso es que hoy todavía haya quienes se atrevan a ver este genocidio como una lucha interétnica cuando en realidad se trata de terminar con una forma de gobierno diferente al de este sistema criminal. Se trata de un genocidio para sepultar nuestra historia porque le tienen miedo. Se trata de una masacre que grupos PRIISTAS realizan contra nuestro pueblo por no alinearnos sumisamente como lo hizo la dirigencia del MULT con los dos últimos gobiernos de Oaxaca. Para los que no saben la UBISORT nació en el año 1994 y en 2006 prácticamente desapareció pues solo quedaron de ella unos cuantos pistoleros que siempre han trabajado directamente con los gobiernos( Toño Pájaro, Rufino Juárez...). Nosotros no nos someteremos jamás para permitir el robo de nuestros recursos naturales, nosotros no nos alinearemos jamás para sus campañas a favor del PRI con su partido CARICATURA regalo de José Murat.

Los niños, mujeres, ancianos, todos los autónomos como nos llaman en nuestra región preguntamos: ¿Así se va a un dialogo?. Respondemos a quienes en días pasados de manera por demás cobarde nos invitan a deponer las armas y sentarnos al dialogo: No creen señores que si tuviéramos armas nosotros, por el mínimo sentido de sobre vivencia, los muertos fueran de los dos lados?. Ya basta, infórmense bien y si de veras son adherentes a la otra campaña hagan honor a su militancia.

Llamamos a todos los compañeros de la otra campaña que en verdad lo son y a los que sin ser de la otra son compañeros en verdad a visitar nuestro campamento donde poco a poco van llegando los compañeros desplazados, en el zócalo de Oaxaca, y donde compañeros médicos de esos que este país tanto necesita, o sea de esos médicos que caminan abajo y al izquierda, curan a nuestros heridos ahí se podrán informar por su misma voz quien los hirió y quien masacro a nuestro pueblo.

¡Respeto a la vida y a la dignidad de los desplazados!

¡Basta de silencio cómplice!

¡No más violencia!

R E S P E T U O S A M E N T E

MUNICIPIO AUTONOMO DE SAN JUAN COPALA

martes, 12 de octubre de 2010

Comandanta Ramona: La historia en un momento...


Comandanta Ramona:
La historia en un momento...
12 de octubre de 1996







Discurso de la Comandanta Ramona en la celebración del 12 de octubre de 1996, en el zócalo de la Ciudad de México.

12 de octubre de 1996
Al pueblo de México:
Hermanos y hermanas:
Por mi voz habla la voz del Ejército Zapatista de Liberación Nacional.

Hoy hemos venido hasta aquí, hasta el centro de este país que se llama México, para decirle a todos los mexicanos y mexicanas unas cuantas palabras que tenemos nosotros los zapatistas.

De por sí es muy pequeña nuestra palabra de los zapatistas, pero su paso es muy grande y camina muy lejos y se entra en muchos corazones.

Estos corazones que nos escucharon son de hombres, mujeres, niños y ancianos que quieren un país democrático, libre y justo.

Estos corazones son los que nos ayudaron a llegar hasta el Zócalo de la ciudad de México. Estos corazones quieren lo mismo que los zapatistas queremos y lo que todos queremos.

Queremos un México que nos tome en cuenta como seres humanos, que nos respete y reconozca nuestra dignidad.

Por eso queremos unir nuestra pequeña voz de zapatistas a la voz grande de todos los que luchan por un México nuevo.

Llegamos hasta aquí para gritar, junto con todos, los ya no, que nunca más un México sin nosotros. Eso queremos, un México donde todos tengamos un lugar digno. Por eso estamos dispuestos a participar en un gran diálogo nacional con todos.

Un diálogo donde nuestra palabra sea una palabra más en muchas palabras y nuestro corazón sea un corazón más dentro de muchos corazones.

Para este diálogo nacional vamos a caminar mucho y vamos a dar muchos pasos.
Nosotros estamos dispuestos a todo para dar estos pasos.

Pero necesitamos que todos ustedes nos ayuden a caminar a todos los zapatistas, así como me ayudaron a mí a caminar hasta aquí.

Hermanos y hermanas mexicanos:


Yo soy la comandante Ramona del Ejército Zapatista de Liberación Nacional. Soy el primero de muchos pasos de los zapatistas al Distrito Federal y a todos los lugares de México. Esperamos que todos ustedes caminen junto a nosotros.

Esta es nuestra palabra, hermanos y hermanas mexicanos.

Gracias.

Desde el Zócalo de la ciudad de México Distrito Federal


Por el Comité Clandestino Revolucionario Indígena-Comandancia General del Ejército Zapatista de Liberación Nacional.



Comandante Ramona

jueves, 7 de octubre de 2010

MST: Balance del movimiento y lo que viene...

"El MST no será rehén del próximo gobierno" -
Gabriel Brito y Valéria Nader

Entrevista con Gilmar Mauro, dirigente del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra

Fuente: Blog Pelusa Radical http://pelusaradical.blogspot.com/


En vísperas del pleito presidencial más vacío de ideas desde tiempos inmemorables, los movimientos sociales y la izquierda deben contrastarse con un nuevo período de sus luchas. Necesitan hacer una amplia reflexión sobre las derrotas acumuladas que, al contrario de lo que se esperaba, fueron profundizadas en el período de Lula. Ese el pensamiento de Gilmar Mauro, dirigente del MST. En la entrevista con Correio da Cidadania, explica la postura del movimiento en la elección y la polémica en torno de un posible apoyo velado de sus dirigentes a la candidatura petista.

Gilmar argumenta que el MST no declaró apoyo a candidato alguno para el primer turno por cuenta del debilitamiento político y social de la izquierda. De modo que el movimiento no es capaz de impedir que gran parte de sus bases opte por Dila, aunque el gobierno de Lula no ha llegado ni cerca de la reforma agraria. Para él, la única diferencia de Lula con Serra es la menor intolerancia al diálogo con el movimiento social (lo que se aplica en Sao Paulo, en la disputa entre Alckmin y Mercadante).

Para Gilmar, es justamente esa retracción de la izquierda, impuesta por fallas propias y también por la victoria del lulismo, que dejó al movimiento en una situación “complicada” para apoyar a candidatos más alineados al proyecto de reforma agraria defendido por el MST, como Plínio Arruda Sampaio (responsable por el plan de reforma agraria de Lula en 2003, posteriormente encajonado) y otros de la izquierda socialista. Además, recuerda que los sin tierra y la reforma agraria poseen apoyos en diversos partidos.

Hasta por la difícil posición en que se encuentra el movimiento en las elecciones de este año, Gilmar resalta que el principal debate a realizarse en la izquierda es al respecto de su propia reconstrucción, de forma unitaria, antes de que cualquier nuevo proyecto o programa a ser anunciado. Solo después de una extensa autocrítica y la conjunción de todos esos factores, concluye, las fuerzas no privilegiadas por el orden podrán volver a enfrentar al capital en todas sus variadas vertientes, inclusive para que un día se alcance la reforma agraria.

Correio da Cidadania: ¿En el actual momento histórico de completa supremacía del agro-negocio en el campo, con sus lazos con grandes y poderosos sectores financieros, industriales y de la política, qué reforma agraria usted considera es posible y necesaria?

Gilmar Mauro: Yo creo que es preciso repensar la reforma agraria, y ella depende hoy de un amplio debate en la sociedad brasilera. Y la sociedad tendrá que discutir qué tipo de uso quiere darle al suelo, a los recursos naturales, al agua, biodiversidad y todo el subsuelo.

En segundo lugar, tenemos que discutir que tipo de comida vamos a querer de aquí para adelante. Si optamos por mantener el actual uso del suelo brasilero para producir commodities y exportarlos, utilizando agroquímicos en gran escala, realmente no precisamos de reforma agraria.

El tercer aspecto es el paradigma tecnológico que queremos para el futuro. Nadie está hablando de volver al pasado, al movimiento ludista de acabar con las máquinas, pero la tecnología precisa estar al servicio de la humanidad. Es evidente que debe haber producción para atender las demandas, sean de alimentación o de materia prima, pero con tecnologías de menor impacto ambiental que las actuales, ayudando a disminuir la penuria del trabajo, sobre lo cual nadie discrepa.

Evidentemente, vamos a continuar ocupando tierras, porque hay gente que quiere ser asentada y trabajar. En tanto, más allá del MST, tal debate precisa ser jugado en la sociedad, pues, si ella no discute y coloca su posición, no hay reforma agraria viable dentro del modelo que está siendo aplicado en el momento.

Correio da Cidadania: ¿Lula llegó cerca de alcanzar algunos de esos objetivos en los moledes defendidos por el movimiento campesino?

Gilmar Mauro: No, en verdad, lo que tenemos hoy son políticas agrarias y de asentamientos. No podemos hablar de reforma agraria en el país. Existen asentamientos, fruto de la presión, regularizaciones fundiarias, pero desde el punto de vista de la concentración latifundista está todo intacto, o sea, el 1% de los propietarios detentan el 46% de las tierras. Y desde el punto de vista del modelo y la producción agrícola, la exportación de commodities, amplió el modelo históricamente construido en el país. Tenemos pequeñas mejorías en la agricultura familiar, alguna cosita en crédito, merienda escolar, que posibilitan a la pequeña agricultura algún tipo de ingreso, pero no podemos hablar de reforma agraria. Si quisiéramos hablar de reforma agraria de hecho, es preciso cambiar el modelo y la estructura latifundista brasilera, lo que no ocurrió hasta el día de hoy en la historia del país.

Correio da Cidadania: Dirigentes del movimiento pasaron los últimos años haciendo duras críticas al abandono a que el gobierno Lula relegó las políticas agrarias defendidas por el PT durante años. No obstante, recientemente, algunos líderes mostraron inclinación por la candidatura de Dilma en relación a la de Serra. ¿Cómo usted explica estos posicionamientos?

Gilmar Mauro: El MST, y prefiero hablar de aquello que fue decidido por la dirección adoptó una postura de no apoyo a ningún candidato, tanto a presidente como a gobernador y otros cargos. Eso entendiendo una serie de cuestiones que relacionamos desde el punto de vista de la reforma agraria y de un conjunto bastante amplio de partidos, que van desde la izquierda socialista, revolucionaria, hasta sectores, digamos, demócratas republicanos. Tenemos apoyo en la causa en sectores del PMDB, del PDT y así por delante.
Así, el MST optó por no tomar posición a favor de ningún candidato en esta primera vuelta de las elecciones. Hasta para preservar las alianzas que construimos históricamente y la perspectiva, inclusive, de reconstrucción de una izquierda progresista en el próximo período. Creo que, en este momento histórico, las condiciones no fueron propicias en términos de una unificación de las candidaturas de izquierda. Pero este es nuestro momento histórico y no podemos quedar llorando sobre la leche derramada. Tenemos que aprender de las lecciones de ese proceso en la izquierda brasilera y pensar en el próximo período. Los desafíos están puestos para que se piense en la reconstitución política de una izquierda en nuestro país.

Correio da Cidadania: ¿Esa postura de no declarar apoyo a ningún candidato iría al encuentro de la idea siempre frisada de mantener la autonomía del movimiento, incluso con esas demostraciones de simpatía relativas a una victoria petista?

Gilmar Mauro: Exactamente. Porque, independientemente de cualquier cosa, una reforma agraria que de hecho altere toda la estructura latifundista brasilera, pensando en nuevos paradigmas, de producción, tecnología y modelo, sólo se realizará en la medida que las fuerzas populares tengan un protagonismo mayor.

Y estamos en un momento de crisis, con debilitamiento de los sectores sociales, pérdida de fuerza política. Puedo hablar por el MST: creo que hubo una pérdida de fuerza política y social en el último período. Y lo mismo ha ocurrido en los movimientos urbanos, sindicales, estudiantiles, lo que no es una particularidad brasilera, sino una realidad mundial. Ese es el contexto que coloca a los sectores reformistas, no sólo a los revolucionarios, en una situación defensiva a escala internacional hoy en día.

Correio da Cidadania: En una entrevista que usted concedió en mayo, había una declaración de que la tendencia del movimiento sería quedarse al lado de los que apoyasen la reforma agraria "profunda y radical". ¿Cómo interpretar esa intención a la luz de lo que de hecho ocurre ahora en lo que se refiere al posicionamiento de dirigentes y militantes? ¿En su opinión, Dilma caminaría hacia esa reforma profunda e radical?

Gilmar Mauro: Creo que no. Creo que ningún gobierno haría ese camino. Podríamos elegir al más radical, Rui Costa Pimenta (Partido Causa Operaria), y no tendría las condiciones de hacerla. Esto, porque sin fuerza social y política organizada, no se consigue, la correlación de fuerzas no lo permite. El indicativo del MST, inclusive de acuerdo con lo que discutió la dirección del movimiento, es votar a los candidatos que defienden la reforma agraria, tanto para el parlamento como para la principal elección. Creo que la militancia ha hecho esto, apoyando las candidaturas que defienden la reforma agraria y tengan un compromiso histórico con ella.

Muchos militantes van a votar por Plinio. Otra parte vota por Ivan Pinheiro, también por Ze María, y una parte vota por Dilma. Creo que, la mayoría de las bases del movimiento vota por Dilma, aunque el gobierno Lula haya estado lejos de la reforma agraria. Hubo pequeños avances, algunos asentamientos, y una parte de nuestras bases entiende que votar por Dilma es una opción. Por cuenta de todo eso, el MST quedó en esa situación. No tomamos partido, como entidad, por ninguna candidatura, pero estimulamos el voto por quien apoya la reforma agraria.

Correio da Cidadania: ¿Habría, de hecho, diferencias sustanciales entre los gobiernos de Serra y Dilma en la consecución de la reforma agraria y en el relacionamiento con los movimientos sociales?

Gilmar Mauro: En ese caso sí. Con Serra, nosotros nunca conseguimos hacer una reunión. La única reunión que hicimos aquí fue con el jefe de la Casa Civil, Aloysio Nunes, y el rumor decía que no quería hablar con nosotros. Por otro lado, tuvimos varias desocupaciones violentas (en Cutrale, por ejemplo), en articulación entre el gobierno estadual y federal, Rede Globo y los hacendados de la región, buscando criminalizar al movimiento.

Las investidas de Serra contra los profesores, la Policía Civil, los pobladores del Jardim Pantanal, contra los sin tierra, son muestras de un proceso de dificultad de diálogo del gobierno Serra con el movimiento social. Algunos prefeitos (alcaldes) del PSDB que hemos contactado tienen mucha dificultad hasta para reunirse con Serra. Es muy grande la dificultad en relacionarse, no sólo con los movimientos sociales sino con otras personas.

No creo, del punto de vista del proyecto político, que exista tanta diferencia entre los dos. Pero, por el lado de los movimientos sociales, hay sí una diferencia entre Serra y Dilma, principalmente en el sentido de criminalizar a los movimientos y por la dificultad de ver al movimiento social como parte del proceso de construcción y de luchas.

Correio da Cidadania: ¿Aunque existan estas diferencias entre eventuales gobiernos Dilma o Serra, el posicionamiento más favorable del movimiento en relación a una victoria petista no sería, de cualquier modo, un salvo-conducto a la permanencia de un cierto inmovilismo y pérdida de autonomía de los movimientos sociales, tan destacados por el propio MST a lo largo de los últimos años, en los cuáles Lula presidió Brasil?

Gilmar Mauro: No, por el contrario. Y otra, el Movimiento Sin Tierra tiene por principio su autonomía política. No creo y no tengo duda alguna, de que el movimiento no será rehén del próximo gobierno. Apuesto todas mis fichas en eso, porque el movimiento habrá de continuar luchando por la reforma agraria. Aunque la coyuntura sea adversa, la izquierda tenga poca fuerza, y el movimiento social igual, es tiempo de remar contra la marea. El MST va a continuar organizando su base. Pienso que dos cosas son fundamentales: primeramente, una organización que no coloca como defensa principal las necesidades de su base social, es una organización que no tiene sentido, por eso muchas dejaron de existir. Por tanto, el MST tiene que continuar dando respuestas a sus bases, con luchas, marchas, que son las necesidades corporativas de la base real del MST.

El segundo aspecto, es que quien no lo entiende tendrá dificultades para comprender la propia lucha de clases: las personas se organizan a partir de sus necesidades, sean económicas o físicas, sean ideológicas o espirituales. El sujeto va a la iglesia, porque tiene necesidad. Si la organización pierde de vista eso, pierde el sentido, se vuelve una casta. Y creo que el MST nunca será así. Otra, la marca del MST: el movimiento nunca fue conocido internacionalmente por un buen programa, por un buen discurso, bellas elaboraciones. Fue conocido internacionalmente por una cosa: planificaba y hacía. A veces con errores, y como movimiento social cometimos muchos, pero eso le dio moral al movimiento frente a las personas. Lo que proyectó a nuestro movimiento fue el planificar y ejecutar. Evidentemente, queremos avanzar desde el punto de vista teórico, de elaboración de programas, porque no sólo basta una práctica relevante. Es preciso tener una teoría conducente con el proceso y las ganas de luchar.

Correio da Cidadania: ¿Incluso siendo bastante comprensible todo este escenario de dificultades en la izquierda y en el movimiento, no podría haber existido una posición más explícita respecto a la primera vuelta, a favor, por ejemplo, de la candidatura del PSOL, Plínio Arruda Sampaio, que sabidamente siempre se posicionó francamente a favor de la reforma agraria en los moldes defendidos por el MST, además de ser parte a lo largo de décadas, de las entidades que luchan por ese objetivo?

Gilmar Mauro: Creo que Plínio es una gran figura en esos aspectos, la mejor entre todos los candidatos. Siempre estuvo al lado de los trabajadores, de la reforma agraria, es un gran luchador y un ejemplo para nuestra militancia. A de la edad, continúa de pie. Ni siempre lo que consideramos lo más correcto da liga en el momento, como es el caso de la candidatura.

Creo que es un tiempo histórico de muchas dificultades. Tuvimos problemas en las esferas partidarias para lograr la unificación de una candidatura. El PSTU, PSOL, PCO, PCB no consiguieron unificarse. Es un tiempo de fragmentación, eso es real, objetivo. Es tiempo de dificultades, inclusive de articulación de los sectores de izquierda, del movimiento social, para juntarse en una candidatura que catalizara todo el descontento social. Yo diría que ese tiempo histórico explica más que cualquier cosa. Se mirásemos por la base del MST, caeríamos de cabeza en la candidatura de Dilma porque la base del MST hoy es lulista. Este es un fenómeno que precisamos entender. Exagerando, Lula parece generar más consenso que Jesús, 94% de las personas lo aprueban o dicen que su gobierno es regular. Es algo que no se podía imaginar.

Por tanto, se efectivamente hiciéramos una discusión con nuestras bases, tendríamos que haber apoyado a Dilma. Pero, la militancia reflexionó y se preguntó cómo iría a apoyar abiertamente a Dilma en estas elecciones, cuando el gobierno Lula se apoyó en el agro-negocio, en el gran capital financiero que ganó mucho dinero, mientras que la reforma agraria avanzó tan poco. No daba para salir en defensa de un gobierno Dilma.

De esa forma, optamos por no declarar apoyo a nadie en la primera vuelta. Apoyar a Plinio sería una postura más militante. Tomar posición a favor de Plinio mientras la base queda al lado de Dilma, crearía una situación muy difícil. Es complicado. Estoy siendo muy honesto sobre este punto. Siendo así, lo mejor fue adoptar la postura de no declarar apoyo a ningún candidato.

Correio da Cidadania: En entrevista al Correio este año, el sociólogo Ricardo Antunes criticó la falta de “organicidad” en nuestra izquierda, que, además de no conseguir unificarse en un período electoral, tampoco ha conseguido incorporar a los movimientos sociales en sus más diversas luchas ¿Usted vislumbra alguna forma de reorganización en la izquierda en el próximo período?

Gilmar Mauro: Es difícil hablar en tiempos, pero algunos ingredientes son premisas fundamentales si quisiéramos construir un proceso sustentable, para usar un verbo a la moda. Primeramente, precisamos hacer un balance político profundo, honesto y serio de las experiencias de la izquierda partidaria, del movimiento social y sindical. Es preciso decir: “nuestros instrumentos son importantes, fueron construidos por nosotros, es lo que tenemos, pero hoy no dan cuenta para organizar a la clase trabajadora”. Hay muchos sectores de la clase trabajadora que no están ni dispuestos para ningún tipo de organización”. En segundo lugar, fue perdida completamente perdida la referencia, hasta el sentido de clase, los lazos de solidaridad. Las personas no se identifican como clase trabajadora. La Nike, por ejemplo, no tiene ninguna fábrica, es un proceso todo tercerizado, fragmentado, atomizando a la clase. En Brasil, más concretamente, ¡son más de 600 mil las vendedoras de Avon! Si sumamos a Natura, Herbalife, son más de 1 millón de personas. Y si las llamamos de “clase trabajadora de Avon”, ellas van a decir “consultoras de venta”. Porque los instrumentos hasta ahora construidos no dan cuenta de esa dinámica y de la nueva realidad de la clase trabajadora. Si no hacemos una autocrítica, difícilmente vamos conseguir pensar en formas organizativas y proyectos para un nuevo período.

Otro aspecto es que debemos parar con ese asunto de quien es el dueño de la verdad. Cada uno tiene una parte de la verdad, y posibles razones en sus análisis, pero es apenas verdad entre todas las demás, de otros agrupamientos y sectores. Necesitamos la petulancia, la arrogancia intelectual, mirar nuestra fragmentación, nuestra débil fuerza social y política…Y la organización sin eso vale cero, mismo que se tenga el mejor programa del mundo. Si nos miramos entre todos, veremos que cada uno tiene su parcela de contribución; y juntando todo eso todavía somos un agrupamiento muy pequeño para enfrentar toda la lógica del capital impuesta a todo el país. Por lo pronto, para mí, esas son las condiciones analíticas fundamentales.

¿Es preciso reorganizar la izquierda? Es preciso un nuevo programa, una nueva estrategia? No tengo la menor duda. Pero no sirve juntar a media docena, decir, “la nueva estrategia es esta”, y salir a reclutar gente para mi corriente. No sirve. De tal manera, que es preciso el debate, la autocrítica, el análisis, de modo que se comprometa a la militancia y se piense al respecto, lo que necesita tiempo. Mas que salir con una propuesta de un nuevo partido para el año que viene, es preciso crear una metodología para el debate político, que nos permita, en el momento de crear nuevos instrumentos, tener la suficiente acumulación de fuerzas, evitando que sea un solo un agrupamiento más para disputar con los otros.

Infelizmente, la izquierda ve esa disputa por la hegemonía como una competencia entre instrumentos, y no como la posibilidad de fortalecimiento, una vez que, para hacer la revolución social, serán necesarias millones de personas conscientes. Está en el orden del día, si no hacemos el balance, los grupos van a creerse en el acierto por seguir intentando imponer su hegemonía sobre los demás. Mira, si no hacemos un balance crítico de estos tiempos, somos uno bobos. Así podemos hablar de cualquier cosa, menos de revolución.

Es un momento de extraer todas las lecciones, con mucha humildad, y a partir de allí pensar en un nuevo periodo. Junto a eso, un análisis muy profundo de la nueva realidad socio-económica mundial. ¿Qué es la clase trabajadora en el mundo de hoy? ¿Por qué si no tenemos claridad sobre tal cuestión, cómo vamos a saber qué instrumentos y programas son necesarios a esa nueva clase?

Las elecciones van a pasar, de modo que para mi ese es el debate central. Y en lo que creo y en lo que a mí respecta, entraremos con todas las fuerzas en ese debate político del próximo período.

Correio da Cidadania: Retornando finalmente a la realidad más inmediata ¿En el estado de Sao Paulo, como piensa sería una victoria de Alckmin? ¿Sería más fácil negociar con Mercadante?

Gilmar Mauro: No se, es una pregunta difícil. Con Alckmin también tuvimos una experiencia anterior: con él no conseguimos siquiera reunirnos. Después de la muerte de Mario Covas, todo lo relacionado a la agricultura, a la reforma agraria, fue completamente abandonado. El propios ITEPS (Instituto de Terras do Estado de São Paulo) fue saboteado; el trato con la Policía Civil, los profesores, con el movimiento social siempre fue criminalizado.

Espero que por su trayecto histórico dentro del PT, Mercadante no sea como Alckmin, espero que sea un poco mejor. Para ser honesto: precisamos definir a quien preferimos enfrentar, pues vamos a enfrentar cualquiera sea el que gane en el ámbito federal o estadual. Así, la pregunta para nosotros sería ¿es mejor enfrentar a quien? A mi modo de ver, es mejor enfrentar a Mercadante. No se si llegará a la segunda vuelta, hago fuerza para que sí, pues para el movimiento social es mejor encarar a Mercadante. Esa es mi impresión. Infelizmente, creo que aquí en Sao Paulo, nosotros tenemos una situación peor todavía, pues enfrentamos a los medios, Veja, Folha, Estado de Sao Paulo, Globo, en fin, o lo que hay de peor de las oligarquías y de medios de comunicación en mayor número. Y en cuanto a la izquierda algo muy parecido: hay mucha cosa buena, pero también existen vicios en grandes proporciones. Es una realidad bastante compleja. Los desafíos nos hacen crecer, Los desafíos nos hacen crecer, tenemos que actuar y repensar en este período, inclusive aquí en Sao Paulo.

Correio da Cidadania, 27-9-10 /
Traducción de Ernesto Herrera – Correspondencia de Prensa: germain5@chasque.net

miércoles, 6 de octubre de 2010

Copala: "Todo se comparte; el dolor también"

Emergencia humanitaria en Copala
Autor: Zósimo Camacho
1 October 2010
Fuente y Fotos: CONTRALÍNEA

Luego de casi 10 meses bajo sitio, cayó San Juan Copala. Los paramilitares estrecharon el cerco el 7 de septiembre pasado y en los días subsiguientes ocuparon el centro político y ceremonial de la cultura triqui. Nada, nadie, les impidió tumbar puertas, derribar muros, incendiar hogares, saquear casas. El terror se apoderó de las últimas 30 familias que resistían y huyeron arañando cerros, arrastrando pies, cargando ancianos, apurando niños, cayendo en barrancos. Muchos salieron con impactos de bala. No han sido atendidos por médico alguno. Bajo fuego 303 días, desplazados ahora, invisibles siempre, los triquis que demandan autonomía señalan al MULT y a la Ubisort. Acusan a Amado Ortiz y a Antonio Cruz de estar al frente del asalto

Yosoyuxi, Copala. Descalza, Altagracia Fernández de Jesús se esconde entre las piernas de su padre. A sus cuatro años, habla apenas. Su madre, Francisca de Jesús, fue baleada por la espalda el pasado 7 de septiembre cuando intentaba salir de San Juan Copala. Se encuentra en un hospital de Oaxaca. Su hermano, Elías, fue asesinado a los nueve años de edad el 29 de noviembre de 2009 en un salón de clases, cuando los paramilitares tirotearon la escuela. Su hermana, Maribel, no pudo salir del internado de Copala y se quedó en el centro del pueblo. Su padre, Benito Fernández, carpintero de 53 años, con heridas en un pie, es el rostro de la desolación.

Casi un cuarto de su vida ha tenido que permanecer escondida en su casa, entre estruendos y sobresaltos. La madrugada lluviosa del 19 de septiembre su padre la tomó en sus brazos; por momentos, debió dejarla caminar entre el breñal mientras él se echaba a cuestas a Jacinta González Guzmán, de 80 años de edad. El hombre algunas veces rodó por el monte con la anciana; otras, con la niña.
En ese grupo que huía de “la lluvia de balas” también caminaban Gabino Hernández, campesino de 53 años; Margarita López Martínez, de 45; Cornelio López Martínez, de 51, y Susana López Martínez, de 18. La cuadrilla tuvo suerte: no fue encontrada por los grupos armados.

Consigo no trajeron comida, pues ya no tenían. Y en la huida sólo trajeron la ropa que hasta ahora llevan puesta. Atrás dejaron sus casas, huipiles, algunos animales de corral, documentos personales, fotografías familiares, altares, petates, utensilios de cocina, enseres domésticos, ropa…

Pero por lo que lloran es intangible. Han sido expulsados del Chuman’a, como ellos llaman a San Juan Copala, el centro ceremonial de los triquis. Se preocupan por sus santos, que quedaron prisioneros en la iglesia, sin las flores y veladoras que son su alimento. Y se les quiebra la voz cuando hacen la cuenta de los años que vivieron ahí: 12, 20, 40, 80, según las edades. Las mujeres que no nacieron en San Juan, pero que se casaron en ese pueblo, podrán dudar de la edad que tienen y el año que nacieron; pero no, del año en que llegaron ni el tiempo que vivieron ahí.

—Hay esperanza de regresar a San Juan Copala –dice Cornelio López. Había hablado con fuerza y seguridad. Pero ahora que se ha referido al Chuman’a, donde cultivaba la tierra desde hace casi 40 años, su voz se quiebra.

—Primeramente dios –agrega con dificultad–. Uno no sabe; dios sabe…

Desde cada casa “prestada”, los desplazados cuentan sus historias, muestran sus heridas. La mayoría de las veces hablan a través de intérprete. La tristeza y la indignación pasan del triqui al español. Explican cómo cada grupo, cada familia, cada individuo lograron evadir a los paramilitares. Todos coinciden en que los disparos que los mantuvieron en sus casas por casi 10 meses arreciaron el 13 de septiembre, cuando los grupos armados tomaron la presidencia municipal.

Desde ahí comenzaron a expandirse día con día hasta ocupar todo el pueblo. Asaltaron calle por calle, casa por casa. Por altavoz, ordenaron a hombres y mujeres que salieran de sus hogares y se entregaran; advirtieron que colgarían al presidente municipal autónomo Jesús Martínez Flores y a los hombres de la comunidad. Algunas familias comenzaron a salir del pueblo la noche siguiente; otras, decidieron resistir unos días más.

Los que comenzaron a salir y tuvieron la “mala suerte” de ser descubiertos por los paramilitares fueron baleados, sometidos; las mujeres, violadas, como Natalia Cruz Bautista, de 42 años, quien fue torturada y vejada (le cortaron su cabello, la desnudaron y violaron), y Francisca de Jesús García (quien logró huir pero con un impacto de bala en el hombro derecho; hoy está en peligro de perder el brazo).

Quienes se quedaron unos días más escucharon el derrumbe de muros, el saqueo y vieron las llamas. Angelina Ramírez Ortega, de 71 años, fue de las últimas personas en abandonar San Juan Copala. Fue testigo de la matanza de animales domésticos y de corral, de los tiroteos a las casas donde el humo de la cocina delataba a los que resistían. La mujer salió cuando ya el grupo armado ocupaba casi todo el pueblo, el 19 de septiembre.

Se asoma a la puerta de la casa que ahora le da cobijo. Maltrecha, espera las preguntas de los reporteros con escepticismo, pero con respeto. Destacan su mano y su brazo izquierdos grotescamente tumefactos y amoratados. Su brazo está roto, a la altura del codo. No ha sido evaluada por ningún médico.

Cuenta que salió sola durante la madrugada: esperó la oscuridad más espesa. Llovía. Resbaló en el lodo y, dando tumbos, llegó hasta el fondo de una barranca. No sabe cuánto tiempo estuvo desmayada. Fue encontrada por los propios paramilitares.

Angelina Ramírez dice que, cuando volvió en sí, Antonio Cruz, Toño Pájaro, uno de los líderes de la Unión de Bienestar Social de la Región Triqui (Ubisort), la tomaba de los cabellos y le colocaba el cañón de la metralleta en la cabeza. Ella, cabeza blanca manchada de sangre, menuda, rostro arrugado, le suplicó que le perdonara la vida.

A través de un intérprete, la abuela explica que no tuvo otro remedio que decirle a Toño Pájaro que ella era ya vieja, que no le hacía daño a nadie, que es viuda y que ya sus nietas han sido heridas por ellos (Selene y Adela Ramírez, ambas baleadas; Adela, con una bala alojada en su espina dorsal que la mantiene paralítica).

A decir de Angelina, Toño Pájaro le advirtió que nunca volviera, que no creyera que aún tiene casa en San Juan Copala. Le prometió que si intenta regresar o reclamar algo, será asesinada.

Otros no salieron. José González Cruz, María Juana Agustina (abuelos de alrededor de 100 años) y Sofía Martínez (de 17 años) quedaron atrapados en sus casas. Hasta el momento, se desconoce su situación.

Todos los desplazados aseguran que una de las cabezas del grupo que asaltó San Juan Copala es Antonio Cruz. La otra, aseguran, es Amado Ortiz, del Movimiento de Unificación y Lucha Triqui (MULT), originario de la comunidad El Rastrojo. Señalan incluso que de la Ubisort son apenas una decena de hombres armados, mientras que los del MULT son “incontables”. Afirman que la mayoría de pistoleros proviene de las comunidades de Rastrojo, Cieneguilla y Coyuchi. Y entre los triquis paramilitares, habría algunos mestizos con pasamontañas.

El MULT, en voz de Heriberto Pazos Ortiz y en comunicados, ha negado su participación en la ocupación de San Juan Copala.
Amanece. La neblina apenas levanta. El pueblo escurre. Verde intenso en los montes y las huertas. Amarillo en las colinas de maíz espigado. Humaredas en las casas de dos aguas. Las mujeres de Yosoyuxi echan tortillas de masa de maíz a los comales. Además de sus familias, comerán las desplazadas de San Juan Copala. Todo se comparte; el dolor también.

En esta comunidad se refugian 82 personas; otras 94 se reparten en cuatro comunidades más y en las ciudades de Oaxaca y México. Se trata exclusivamente de las que salieron a partir del 7 de septiembre. El total de exiliados de San Juan Copala desde que empezó el sitio armado el 28 de noviembre de 2009 supera las 800 personas.

Desde que se fundó el Municipio Autónomo, los grupos armados han asesinado, al menos, a 15 personas y herido a 16. Entre los asesinados se encuentran líderes del movimiento autonomista. El máximo líder natural de la región, Timoteo Alejandro Ramírez, fue ejecutado junto con su esposa en su propio domicilio. Se trató de un operativo de más de seis meses con sicarios encubiertos.

El Municipio Autónomo fue impulsado por una escisión del MULT: el Movimiento de Unificación y Lucha Triqui Independiente (MULTI). A mediados de 2006, Timoteo Alejandro Ramírez y los líderes naturales de cuatro comunidades más rompieron con la dirigencia –mestiza– del MULT, que encabeza, desde la ciudad de Oaxaca, Heriberto Pazos Ortiz. A las diferencias en la asignación de recursos y en las prácticas “disciplinarias” que impone el MULT, se sumó la creación del Partido de Unidad Popular. Los triquis se dijeron engañados y decidieron no sumarse al partido. Ambos grupos se tacharon de traidores. Y las emboscadas contra los que se escindieron comenzaron.

En 2007, el MULTI impulsó la creación del Municipio Autónomo, basado en usos y costumbres, y con el que se liberara a los indígenas de las organizaciones y los partidos políticos. El MULTI dijo estar dispuesto a fenecer como organización para dar paso a un gobierno autónomo. Algunas comunidades de la Ubisort y militantes del MULT abrazaron también el proyecto autonomista.

Las dos organizaciones tradicionales, por mucho tiempo antagónicas, el MULT y la Ubisort, se sintieron desplazadas y amenazadas. Sus cúpulas rechazaron la creación del Municipio Autónomo.

Y es que el poder político no lo es todo. La entrega de recursos federales y estatales no se realiza de manera directa a las comunidades. Desde la década de 1980, el dinero se entrega a las organizaciones y ellas deciden cómo invertirlo en “sus” comunidades.

En enero de 2007, San Juan Copala, Yosoyuxi, Paraje Pérez, Santa Cruz Tilapa, Guadalupe Tilapa y Agua Fría nombraron autoridades municipales autónomas respaldadas por las respectivas asambleas comunitarias: los consejos de ancianos, los mayordomos y los líderes naturales de cada comunidad.

Por casi dos años, el proyecto autonómico funcionó: creció el número de simpatizantes y los proyectos educativos y de salud autónomos suplantaron con éxito a los tradicionales. El cerco paramilitar inició el 28 de noviembre de 2009. Durante casi 10 meses, los pobladores vivieron en un estado de sitio. Las llamadas de auxilio no fueron atendidas y los grupos paramilitares terminaron ocupando San Juan Copala. Los gobiernos federal, estatal y municipal dejaron a su suerte a los triquis que reclamaron autonomía.

Para simpatizantes del movimiento autonómico, la ocupación de Copala sólo fue posible con el asesinato de Timoteo Alejandro Ramírez, orador en su lengua triqui y quien gozaba de prestigio incluso entre las organizaciones antagónicas. Se trataba del máximo líder natural de siete comunidades y del MULTI.

—La autonomía va a continuar. Timo vive. Y yo le prometí a Timo dar la vida por la autonomía. Y así va a ser. No nos vamos a arrodillar a MULT o Ubisort –dice Miguel Ángel Velasco, desde otra comunidad simpatizante del movimiento autonómico que le ha dado cobijo.

Explica que salió hasta el final: el día 19, con cinco “chamaquitos”, sus hijos más pequeños. También ese día salieron sus hijos adolescentes, pero por rumbos distintos: “Si alguien tenía la ‘mala suerte’, que no le tocara a todos”.

Uno de esos muchachos, Pablo Velasco Dorantes, de 16 años de edad, fue herido de bala en el pie y en la mano izquierdos. Con tranquilidad, explica que la madrugada del 17 su casa fue atacada como si se tratara de una tormenta de balas.

Para salir de San Juan Copala, caminó arrastrando un pie en el monte, alrededor de 18 kilómetros por más de cinco horas.

—Y todavía nos dicen que vayamos al diálogo. No sé si ustedes estarían de acuerdo en dialogar si los sacaran de sus casas –dice, indignada, Felipa de Jesús Suárez, de 44 años de edad.

En las casas, el fogón se suaviza pero no se apaga. Pobladores de Yosoyuxi y huéspedes tienden petates y cobijas para pasar la noche. Hay quienes prefieren dormir en los traspatios a pesar de la brizna; otros, se recuestan junto con los perros.

—Narit duini’ iue (nos vemos mañana) –se dicen antes de dejar de hablar. No todos logran conciliar el sueño.

Asesinados en San Juan Copala desde que se fundó el Municipio Autónomo

Fecha Nombre Edad
7 de abril de 2008 Teresa Bautista Merino 24
Felícitas Martínez Sánchez 20
1 de noviembre de 2008 Héctor Antonio Ramírez Paz
29 de noviembre de 2009 Elías Fernández de Jesús 9
17 de abril de 2010 José Celestino Hernández Cruz
27 de abril de 2010 Beatriz Alberta Cariño Trujillo
Jyri Jaakkola
20 de mayo de 2010 Timoteo Alejandro Ramírez
Tleriberta Castro
21 de agosto de 2010 Antonio Ramírez López 72
Antonio Cruz García 29
Rigoberto González 40
5 de septiembre de 2010 Pedro Santos Castro 31
18 de septiembre de 2010 David García Réyez 25
19 de septiembre de 2010 Paulino Ramírez Réyez 28


Heridos por paramilitares desde que se fundó el Municipio Autónomo
Fecha Nombre Edad
29 de noviembre de 2009 Timotelín Velasco
Jacinto Velasco
10 de marzo de 2010 María Rosa Martínez 64
24 de junio de 2010 Miriam Martínez Flores 8
26 de junio de 2010 Marcelina de Jesús López
Celestina Cruz Ramírez 26
29 de julio 2010 Selene Ramírez López 18
Adela Ramírez López 15
21 de agosto de 2010 Víctor de Jesús González 25
Alfredo Martínez González 28
7 de septiembre de 2010 Natalia Cruz Bautista 42
Francisca de Jesús García 45
13 de septiembre de 2010 María Rosa Francisco 39
María Rosa López 55
15 de septiembre de 2010 Macaria Merino Martínez 85
20 de septiembre de 2010 Pablo Velasco Dorantes 16

“Autonomía en Copala, ¿para qué?”: Gabino Cué

Gabino Cué Monteagudo, gobernador electo de Oaxaca, considera que en la región triqui de San Juan Copala volverá la paz bajo su mandato, pero advierte que “no será bajo la figura de Municipio Autónomo ni mediante actos de provocación que generen zozobra y muerte”.

Asegura: “Vamos a hacer todo lo que esté en nuestras manos para que la paz regrese a la región triqui, y tenemos que hacerlo con mucho cuidado y prudencia, no con actos de provocación ni tratando de buscar un Municipio Autónomo que no prevé la ley.”

—¿Por qué no está de acuerdo con el Municipio Autónomo?

—Porque yo creo que vivimos en un régimen constitucional y los municipios se rigen bajo normas constitucionales. En Oaxaca tenemos los municipios basados en usos y costumbres, y se les respetan sus formas de organización, pero no pueden estar al margen de este órgano constitucional ni del pacto federal. En Oaxaca, el municipio es la célula de organización más importante y así debe de seguir. Autonomía, ¿para qué?

En entrevista, lamenta lo que sucede en varias regiones del estado, particularmente en la región triqui de San Juan Copala, donde el conflicto “no es de ahora, sino de tiempo atrás”. La razón, dice, ha sido la pobreza, la marginación, la ausencia de la autoridad y del gobierno.

Argumenta que, debido a esa gran marginación, se sabe de la existencia de dos grupos u organizaciones que históricamente han tenido diferencias que “han generado zozobra y muerte”.

“Recientemente, otra organización, la Unión para el Bienestar Social de la Región Triqui (Ubisort), tomó presencia en la zona. Yo soy de la convicción de que, entre hermanos, no se deben estar matando y que todos debemos hacer un esfuerzo para que vuelva la paz a la región triqui.”

Respecto de su gobierno, que inicia el 1 de diciembre próximo, dice que “se hará lo que esté en nuestras manos para que la paz regrese a la zona triqui. Tenemos que hacerlo con mucho cuidado y prudencia, no con actos de provocación ni tratando de buscar un Municipio Autónomo que no lo prevé la ley y que surgió con el zapatismo”.

Según Gabino Cué, todos los actores tienen que actuar con mucha responsabilidad: el gobernante, desde la responsabilidad que el pueblo le dio, generando las condiciones para que haya paz y armonía y que la ley se aplique. Y los demás líderes, organizaciones, actores que estén cercanos, generando las condiciones para que haya paz y no polarización.

Aunque asegura que “nadie puede minimizar” el conflicto en la zona triqui, intenta desmentir los actos paramilitares y de contrainsurgencia.

“Nadie puede minimizarlo; es un conflicto grave que hay que resolver, pero también se dicen muchas cosas que no existen respecto a los enfrentamientos. Hay muchos rumores de que se están masacrando”.

Agrega que “el tema de los triquis no es de ahora, tiene más de 25 años. ¿Por qué ahora se habla de eso?, porque hay actores que no estaban. Hay toda una red. Eso no significa que en el pasado no se muriera la gente. Sí se moría y muy grave, y había toda una escala de venganzas en una zona violenta; había presencia oficial. Hoy empieza a ser diferente: que actuemos con mucha inteligencia y que no tratemos de ver un tema que ha generado la muerte.

“Vivimos en un régimen de instituciones y las leyes son normas de buena convivencia y nadie puede estar por encima de la ley. San Juan Copala tiene solución, depende de la voluntad de todos. No me he reunido con los distintos grupos, aunque tengo gente que ha mantenido contacto con ellos y hemos tendido puentes de comunicación con el MULT (Movimiento de Unificación y Lucha Triqui) y el MULTI (Movimiento de Unificación y Lucha Triqui Independiente); con la Ubisort, no. Yo creo que sí hay condiciones para resolver el conflicto.” (José Réyez)